Últimos días del año, adiós 2020
Desde que empecé este blog en 2018, este ha sido un post que siempre he hecho una vez al año, el “topicazo” del balance de año. Este año no es muy dado a hacer balances, pero aunque este año todo ha sido diferente (y todos sabemos por qué) también han pasado cosas buenas.
El año empezó como cualquier otro, con sus más y sus menos, pero a medida que avanzaba, una sombra oscura de cernió sobre el mundo, obligándonos a todos a modificar, en gran medida, nuestro día a día. No deseo hacer una descripción dramática de un escenario de todos conocemos, para ello basta con escuchar las noticias 5 minutos.
Si las cosas mejorarán o empeorarán es algo que no sabemos, en cualquier caso, quedémonos con lo bueno: en mi caso, lo mejor ha sido la mudanza a nuestro nuevo hogar. Pudimos aprovechar el confinamiento para acondicionarlo a nuestro gusto y aunque aun falten algunos detalles por terminar, le hemos dado la forma que queríamos con mucho sacrificio y estamos felices por ellos.
Siento que hoy mis palabras tienen cierto tono de amargura, pero no seria realista si no fuera así. Solo le pido a 2021 que las cosas vayan a mejor en vez de a peor, que las vacunas funcionen, que la economía poco a poco se reponga, que los enfermos empiecen a sanar, que la gente se conciencie y sea responsable. Deseo que todos sigamos trabajando y luchando, sin más.
Y para terminar comparto algunas imágenes de este año que se va para dejar paso al siguiente.
El año de la mascarilla
A la fuerza hemos tenido que acostumbrarnos a ella, tanto que ya se ha convertido en un accesorio más.
Mudanza y mejoras en casa
En inicio del confinamiento empezó justo cuando acabábamos la mudanza y eso nos proporcionó mucho tiempo para empezar las mejoras en casa. Como se suele decir, no hay mal que por bien no venga.
Con ilusión, todo ha sido más divertido
Escasas sesiones de fotos
Esto ha sido inevitable, pero a cambio de eso hemos disfrutado "a la fuerza" de los placeres de estar en casa.
Más fotos en casa...
Y menos sesiones fuera de casa.
Nuestra primera cosecha de tomates
¡Y no será la ultima! Uno de nuestros queridos vecinos nos regaló una tomatera y nos gustó tanto que la próxima temporada repetiremos.
Más pasteles caseros
Y no fueron precisamente pocos, ¡creo que eso lo he tenido en común con muchísimas personas durante el confinamiento!
Primera paellas en el jardín
Me siento afortunada de tener un marido que es todo un chef en casa, las paellas en verano les salen cada vez mejor :)
Mi nueva afición: el dibujo
No había caído en la cuenta de que, de pequeña, dibujar, pintar y hacer manualidades era lo que más me gustaba hacer. El confinamiento me devolvió esta afición que ahora he consolidado completamente. Ya hace tiempo que hago manualidades de vez en cuando en el blog, pero el dibujo (y pintura) ha sido todo un redescubrimiento: acuarela, pintura acrílica, lápices de colores... También he empezado a hacer mis primeros pinitos en el mundo del art journal. ¡Creatividad al poder!
Algún tiempo sin poder trabajar...
Y es que, algunos trabajos no pueden hacerse desde casa. Fue extraño que, prácticamente de la noche a la mañana dejáramos de ir a trabajar. Eso sí, cuando volvimos a la rutina sentimos alivio.
Celebraciones familiares
Me gusta celebrarlo absolutamente todo, llamadme exagerada, pero en los tiempos que corren, es importante valorar todos y cada uno de los buenos momentos que se nos presenten.
Os deseo un buen inicio de año, ¡Nos leemos en 2021!
Mis favoritos
@preppyblue